Massive Rock

¡Arriba los bajos!

¡Llamo a los bajistas del mundo a defender nuestros derechos! Gabriel Ruiz Diaz, bajista fundador de los Catupecu Machu está grave por un accidente automovilístico en Palermo, Buenos Aires. El hecho no hace más que confirmar una de mis más locas teorías: el genocidio contra los bajistas. A lo largo de la historia del rock ha existido una conspiración contra los ejecutantes del originalmente llamado “bass guitar”. Hijo ronco y bruto de la delicada y afeminada guitarra (no del contrabajo como debería haber sido), el bajo ha sido postergado a un segundo plano. Paul McCartney es recordado por ser vocalista y compositor de los Beatles, y no por su rol como bajista. En wikipedia aparece como “… british singer, musician and songwriter...” , recién en la octava línea aparece “… and has been an influential bassist...”
La gente común no adicta a la música apenas lo conoce. Cuando cuento que toco bajo no faltan los que ponen cara de extrañeza y les respondo que es como una guitarra con cuatro cuerdas. O sea es más desconocido que el didgeridoo, aunque está presente en la mayoría de las agrupaciones. ¿Recuerdan el capítulo de los Simpsons donde Elvis Costello le ofrece un bajo a Homero? "Hay otros instrumentos divertidos además de la guitarra" , pero Homero lo ignora y se abalanza sobre las Stratocasters y Les Paul's. Y para colmo de males tienes compararlo con una guitarra para definirlo. Pues entonces el piano es un gran arpa acostada con teclas y con forma de mesa. Al parecer sólo los más cultos musicalmente conocen el bajo y su sonido. La gente común parece no escucharlo, aunque en verdad sí lo hace, pero no se percata: entra en forma directa al cerebro, esquivando la ignorante oreja. Quizás esa sea la razón de la conspiración: el mundo teme a los posibles efectos de las -imperceptibles para muchos- notas del bajo, que logran colarse en las capas más internas de tu cabeza.

Es verdad que muchos grupos han contribuido al desprestigio contra el bajo (abundantes agrupaciones poperas y punketas, pero también de rock), lo que ha hecho pensar a algunos que “lo ponen de bonito nomás”, y que en verdad es una guitarra larga de cuatro cuerdas y que suena y se toca como guitarra (con uñeta). Pero también es cierto que grandes bajistas, como John Paul Jones, no han recibido toda la gloria que deberían y que en cambio sí recibieron sus pretenciosos “colegas” guitarristas, vocalistas y bateristas. Son innumerables y variados los casos donde los bajistas han sido injustamente rechazados por sus compañeros: The Darkness, Incubus, Stratovarius, Queen, Pink Floyd, Metallica, los mismos Led Zeppelín (tú podrás nombrar muchos más). ¡Incluso Dios parece estar en contra de nosotros! Pues es cierto, reconozcámoslo, el de arriba (como Jimi) toca una Stratocaster, y Satán tiene una mounstrosa batería con doble bombo. Si se llevaron a nuestro Cliff Burton para que toque con ellos, no permitamos que se lleven a Gabriel.

(escrito en Abril del 2006)